Liderazgo en acción

 “El liderazgo es la capacidad de transformar la visión en realidad” – Warren Bennis.

El liderazgo se podría definir como la capacidad física, intelectual, interpersonal y de comunicación que tiene una persona para coordinar y dirigir un grupo de trabajo u organización a una meta específica. 

     Todos tenemos la potencialidad de serlo. Muchas veces al escuchar la palabra “líder” lo asociamos con autoridad, dirección, coerción, etc. Muchos piensan que un líder solo debe mandar y evaluar cómo se hacen las cosas pero ¿es no es lo que hace un jefe? Un líder es aquella persona que tiene la capacidad para dar el ejemplo, que demuestra cómo en realidad se deben hacer las cosas y las hace juntamente sus colaboradores para que al final, éstos se conviertan en líderes; un líder es una persona que sirve. 

     Dios reconoce a los líderes como aquellos que sirven a los demás, que son ejemplo para sus discípulos, que dejan atrás su ego y orgullo, que obedecen la voluntad de Dios, que confían en él, que viven para servir. 

      Moisés es un ejemplo. Por ciertas circunstancias adversas en su niñez fue criado por egipcios, tenía un puesto especial; de repente se da cuenta de su origen, y decide defender a su pueblo, mata a un egipcio y huye al desierto en donde Dios lo llama y lo comisiona para que liberte al pueblo de Israel. Moisés pudo poner muchas excusas, entre ellas que era tartamudo, que en Egipto lo buscaban para matarlo, que el pueblo no lo escucharía; y quizá puso algunas de estas pero eso no impidió que el propósito que Dios tenía para su vida se cumpliese. Moisés fue diligente y obedeció en todo cuanto Dios le mando, fue un líder que vivió para servir, que guió a un pueblo a través del desierto hasta su libertad. 

      Quizá te preguntes entonces ¿por qué sí Dios tenía un propósito para Moisés lo hizo pasar por tantos problemas? Es simple, Dios ocupaba a un siervo con la mentalidad de un príncipe; Dios necesitaba un líder con la actitud correcta para hacer lo que se le estaba mandando. Déjame decirte que no hay excusa que puedas poner o que te impidan alcanzar el propósito que Dios tiene para tu vida. 

     Un líder influye, produce el cambio, ayuda a otros a ser mejores, es un ejemplo, tiene la actitud correcta. Tú eres un líder nato. La pregunta es ¿aceptas el reto?

Con cariño.

Su amigo El escritor.